¿Tienes piel sensible? Descubre si puedes hacerte tratamientos con láser sin riesgos
- portocarrerogalvez
- 10 nov
- 2 Min. de lectura

Las personas con piel sensible suelen preocuparse al escuchar la palabra “láser”.
El temor más común es que el tratamiento pueda causar irritación, enrojecimiento prolongado o incluso empeorar la sensibilidad.
Pero la buena noticia es que sí es posible realizar tratamientos con láser en pieles sensibles, siempre que se elijan las tecnologías adecuadas y un protocolo médico personalizado.
En Clínica Neolaser, trabajamos con equipos de última generación —NeoCO2, NeoIPL y NeoColor— que permiten ajustar la potencia, profundidad y tiempo de exposición según el tipo de piel de cada paciente.
¿Qué caracteriza a una piel sensible?
La piel sensible reacciona con facilidad a factores como el sol, el frío, ciertos cosméticos o procedimientos estéticos.
Entre los síntomas más comunes están:
Enrojecimiento frecuente.
Ardor o picazón después de aplicar productos.
Tendencia a la resequedad o descamación.
Este tipo de piel requiere mayor cuidado al momento de realizar cualquier tratamiento dermatológico, especialmente los que implican luz o calor.
¿El láser es seguro para pieles sensibles?
Sí, si se aplica con la tecnología correcta y bajo supervisión médica.
En Neolaser, utilizamos distintos tipos de láseres según la necesidad del paciente:
NeoIPL (Luz Pulsada Intensa): ideal para tratar rojeces, rosácea o manchas superficiales. Sus pulsos se ajustan a niveles seguros para pieles delicadas.
NeoColor (Láser Picosegundos): perfecto para eliminar manchas o tatuajes sin generar calor, por lo que no irrita ni inflama la piel sensible.
NeoCO2 (Láser CO2): se usa con parámetros controlados para renovar la piel y mejorar su textura, siempre con evaluación médica previa.
Cuidados antes y después del tratamiento
Para proteger la piel sensible, en Neolaser seguimos un protocolo personalizado antes, durante y después del procedimiento:
Antes del tratamiento:
Evaluamos el tipo de piel con diagnóstico previo.
Indicamos productos calmantes y preparadores cutáneos.
Durante el tratamiento:
Aplicamos anestesia tópica y sistemas de enfriamiento para reducir cualquier sensación de calor.
Ajustamos la intensidad del láser según la tolerancia individual.
Después del tratamiento:
Se recomienda el uso de cremas regeneradoras y protector solar diario FPS 50+.
Evitar el sol directo y exfoliaciones por unos días.
Gracias a este manejo integral, los pacientes con piel sensible pueden obtener resultados visibles sin irritación ni efectos secundarios.
Beneficios del láser en pieles sensibles
Reduce manchas y enrojecimiento sin dañar la barrera cutánea.
Mejora la textura y luminosidad de la piel.
Estimula la regeneración celular de forma natural.
Resultados seguros, controlados y progresivos.
Tener piel sensible no es una contraindicación para los tratamientos con láser.
En Neolaser, priorizamos la seguridad, el diagnóstico preciso y la personalización de cada sesión para que todos nuestros pacientes —incluso los de piel más delicada— puedan disfrutar de una piel saludable, firme y luminosa sin miedo a la irritación.







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